“La verdad es que el Estado cuenta con unas finanzas muy sanas”, declaró Ariana García Vidal, secretaria de Finanzas del Gobierno de Ricardo Gallardo Cardona el 7 de enero, en una rueda de prensa para justificar los ajustes tributarios estatales para el 2025.
A más de tres años de un gobierno gallardista, en el que el reparto de apoyos sociales, conciertos gratuitos y falta de transparencia en la obra pública han sido una constante, ¿realmente están sanas sus finanzas?
Para el 2025, el presupuesto estatal es superior a los 65 mil millones de pesos. Sin embargo, reportes de la Secretaría de Finanzas demuestran que de 2023 a 2024, la deuda estatal subió 53 %, con un monto de 8 mil 395 millones de pesos entre enero y septiembre de 2024, lo que incluía pasivos y adeudos por servicios personales, proveedores, contratistas de obra pública, créditos quirografarios, entre otros conceptos.
Tan solo en créditos quirografarios se contrataron en ese lapso dos mil 440 millones de pesos, de los cuales todavía se debían en septiembre más de mil millones de pesos, y se pagaron más de 396 millones de pesos en intereses.
En el caso de los servicios personales, el gobierno estatal adeuda 50.1 millones de pesos, mientras que a proveedores y contratistas de obra pública se les deben mil 436 millones de pesos, y en lo que respecta a cuentas por pagar, el monto asciende a mil 126 millones de pesos.
Y aún está pendiente el reporte oficial de los créditos quirografarios contratados por Gallardo Cardona en los últimos tres meses de 2024, pero a inicios de diciembre, el gobernador anunció que tramitaría un nuevo préstamo para hacer frente a los compromisos de fin de año, como aguinaldos y otras prestaciones. El monto, dejó entrever en declaraciones a medios de comunicación, sería superior a los dos mil millones de pesos.
Aunado a todo lo anterior, son constantes las protestas de maestros por la falta de pagos, así como del personal del Poder Judicial, ello, sin contar el adeudo por casi cinco mil millones de pesos a Pensiones