En diez años aumentó la incidencia delictiva en San Luis Potosí y la entidad potosina se colocó entre las siete con mayor alza del país, según detalló el estudio “Empresas bajo fuego, victimización y resiliencia del sector empresarial en México”, elaborado por México Evalúa en colaboración con el Centro Internacional para la Empresa Privada (CIEP).
El informe recalca que de 2011 a 2021, la tasa de prevalencia por cada 10 mil unidades económicas subió en Ciudad de México, Colima, Durango, Hidalgo, San Luis Potosí, Sonora y Zacatecas, según los datos de la Encuesta Nacional de Victimización de Empresas (ENVE) que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Añade que aun cuando estados como Guanajuato y Aguascalientes reportaron descensos, esas dos entidades del Bajío, junto con Zacatecas y San Luis Potosí fueron las que mostraron tasas comparativamente más altas que el resto del país.
En el caso de San Luis Potosí, los delitos más frecuentes son robo hormiga y asalto de bienes o dinero, y registra más de tres mil casos por cada 10 mil empresas.
Otro dato destacado es que San Luis Potosí es uno de los estados por los que pasa la carretera 57, considerada una de las más peligrosas y predomina la victimización de las empresas.
A nivel nacional, el estudio resalta “una tendencia relativamente estable entre 2011 y 2017, con una tasa promedio de 3,505 por cada 10,000 empresas víctimas del delito. Posteriormente, en 2019 y 2021, se observan bajas en dicha estadística”. Sin embargo, advierte que en 2020 y 2021 hubo una reducción de la actividad económica debido a la pandemia por covid-19, que condujo al cierre de empresas y la limitación de ciertas actividades económicas y, por lo tanto, de la exposición de las unidades económicas al crimen.
Añadió que la tendencia general indica que los grupos delictivos han mantenido en la mira a las empresas como un blanco persistente, además de que, una vez victimizadas, las unidades económicas quedan ex- puestas a más experiencias delictivas.