El trabajo del hogar en México incorpora a 2.5 millones de personas de 15 años y más. A pesar de su presencia y contribución en los hogares, las trabajadoras del hogar enfrentan serios problemas de explotación y discriminación, urgentes de erradicar desde los ámbitos familiar y escolar, informó Ariana González Rodríguez, adscrita al Centro de investigación y Estudios de Género de la Escuela Nacional de Trabajo Social de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El 30 de marzo se conmemora el Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, establecido por la Organización de las Naciones Unidas como fecha para reivindicar esta actividad y las prerrogativas de quienes la realizan, pues resalta que históricamente han sido un grupo excluido y discriminado a partir de una construcción socio-cultural, en la que a las mujeres se les asigna un rol en el ámbito del hogar.
Se les asocia también a las tareas de cuidado de niñas, niños y de personas adultas mayores; al asumir esta función como algo natural por ellas mismas y la sociedad, se constituye en una actividad invisibilizada y menospreciada, enfatiza la investigadora.
El trabajo doméstico remunerado frecuentemente es mal pagado; se desarrolla en condiciones desfavorables, de explotación, las cuales crean una serie de estigmas sociales que solo se podrán erradicar con un cambio sociocultural sobre la forma en que lo vemos y apreciamos, pues esta actividad resulta vital para el bienestar de millones de hogares, abunda la universitaria.
La invisibilización, apunta, se presenta porque no se entiende como una relación laboral y, en consecuencia, no se da el reconocimiento igualitario respecto de otro tipo de empleos en el país. Tampoco se asume la importancia de remuneraciones justas, acordes con el volumen de quehaceres y la duración de las jornadas, que además suelen ser poco dignas.
El promedio de ingreso mensual en el sector es de 3 mil 829 pesos, pero cuando se desglosa por género queda en evidencia que ellas perciben una paga menor, es decir, 3 mil 767 pesos mientras que los hombres trabajadores del hogar 4 mil 399, lo que significa que por día es menor al salario mínimo vigente en nuestro país. Lo anterior, además de sus derechos laborales: vacaciones, espacios seguros, trato digno y no discriminatorio, así como aguinaldo, entre otros, los cuales no suelen ser proporcionados por la mayoría de los empleadores.
“De acuerdo con los últimos datos que reporta el Instituto Mexicano del Seguro Social hasta diciembre del 2023, sólo 62 mil trabajadoras habían sido registradas por sus empleadores lo que representa apenas el 2.5 por ciento de total de los trabajadores del hogar, lo cual resulta lamentable”, abunda.